octubre 31, 2005

9,8 la aventura

Corriendo los tejados, huyendo

el desaparecido le imputa

¿qué?, ¿te detienes justo cuando todo va bien,

cuando todavía no sonó la alarma y lo hecho

aún no existe?

corre

corre, que vamos a desaparecer,

nos saltaremos el foso de los lamentos insospechados

con la sospecha como propulsión

y la certeza como impulso.

Libélulas luminosas aleteando las desgracias:

no desafíes la fortuna que acompaña cada salto

discutiendo con el miedo como espejo.

¿Cuántas veces saltaste agradeciendo el impulso,

despertando en el sueño suspendido,

cuando el alba a tus ojos aún no admira?

Desvístete del temor y abrígate en la certeza

en cada levitación esplendorosa,

en cada encumbramiento habitado.

Sólo descálzate de tus 9,8 razones para gravitar y

¿Saltas?